Sabella, un estratega vigente

Un solo nombre y el apellido complementario: composición simple, como el estilo que transmite. Quienes vieron jugar a Alejandro Sabella aseguran que era un volante creativo de fina estampa. Sin embargo, de la línea de cal para afuera queda relegado el virtuosismo con el que se desempeñaba dentro de la cancha. Los entrenadores no hacen goles, tampoco se sacan de encima rivales con una gambeta, pero desde sus decisiones pueden señalar el camino. Pachorra ahora desgasta el pizarrón, desentraña las virtudes ajenas y machaca en casa para exprimir la capacidad de sus jugadores. Mal no le va.

Su Estudiantes está a cerca de conquistar el Torneo Apertura 2010. Después de la enorme (e histórica) goleada a River en el Estadio Monumental, el título ya se respira en las calles Pinchas de La Plata. Falta el último paso, aunque la actuación frente al Millonario no dejó dudas. El León sabe que el broche de oro para esta campaña es la vuelta olímpica. ¿Y Sabella? El entrenador, que también condujo al club hacia la Copa Libertadores 2009, fue inteligente para armar una estructura apoyada en las características de los jugadores y luego, en base a esos rasgos, fabricó un verdadero equipo de fútbol. Atrás de la cascara, como si se tratara de un pelotón que se prepara para ir a la batalla, se distingue un conjunto que tácticamente es impecable.

Estudiantes sabe cómo correr la cancha, suele encontrar el momento justo para golpear y cuando hay que defender se impone para cerrar el arco. No es casualidad que sólo haya recibido ocho goles. La mano de Sabella reluce. Asegurar que con poco hace mucho no estaría dentro de lo cierto porque en su plantel hay elementos de jerarquía. Pero, aun sin la técnica individual de hombres como, por ejemplo, José Sosa, el ex ladero de Daniel Passarella generó un circuito basado en la solidaridad, precisión e inteligencia.

Otro aspecto fundamental para explicar el presente de Estudiantes es la continuidad que traen los futbolistas. De la alineación inicial que dispuso Sabella en el Estadio Mineirao, donde Estudiantes superó al Cruzeiro en la final de la Libertadores, siete titulares integran el plantel actual.

Por algo Sabella fue serio candidato para ocupar el puesto que dejó vacante Diego Maradona en la Selección. Por algo asoma en el horizonte de un River que busca conductor. Y por algo, también, los dirigentes de Estudiantes pretenden que cumpla su contrato, que vence en junio de 2011. Mientras tanto, Pachorra, firme en el silencio, moldea el contorno de otra estrella.